martes, 21 de octubre de 2008

Amigo


Cuando una voz amiga pregunta si tienes problemas y te echas a llorar sin más, es cuando te das cuenta de que, a lo que creías que considerabas absurdo, le estás dando más importancia de la que deberías.

El día está gris y en el aire flota el aroma de la codiciada rutina, eso me gusta, pero algo me falta hoy, un abrazo. Un simple abrazo de un amigo.
Y digo bien amigo, que no amiga. Después de tanto caminar, distingo entre varios tipos de relaciones hombre-mujer, la pareja, el amante y el amigo, con todas las combinaciones posibles entre ellas. Pero yo hoy solo quiero al amigo, ese que me recoge en sus brazos dando seguridad y volumen a mi pequeñez.
Me siento sola y solo quiero que, asiéndome con fuerza, me diga que no lo estoy. Él entiende que es difícil esta vida y cuando con su comprensión sonríe, me da las fuerzas que me faltan hoy.
Sólo él me dice que estoy guapa sin buscar un rato de cama. Escondida en su abrazo le hablaría de todas las palabras que me hieren a diario como cristales en el pie descalzo. Sólo en su abrazo generoso le hablaría del egoísmo que nos rodea.

Saco mi violín que hoy suena melancólico en su canto asordinado. También busca tu abrazo, ¿dónde estás amigo mío? Ven esta noche conmigo. Solo siento frío.